La empresa AGRIO, fundada en 1993, inició su actividad con la reconstrucción de pulverizadores usados. Hasta la fecha, la fábrica se ha expandido significativamente, dando un gran paso adelante. Gradualmente, el grupo de pulverizadores AGRIO ha desarrollado pulverizadores arrastrados y autopropulsados de la más alta calidad, diseñados con barras de pulverización de hasta 36 m y tanques con una capacidad de hasta 10.000 litros. En la producción se utilizan soluciones avanzadas basadas en la práctica y la rentabilidad.
El desarrollo de la empresa se vio fuertemente influenciado por la colaboración con el fabricante alemán de pulverizadores GSB. En 1993, AGRIO adquirió una licencia para la producción de barras, lo que le permitió obtener información valiosa sobre cómo fabricar un pulverizador de calidad. La empresa lleva 20 años mejorando sus pulverizadores.
La singularidad de los pulverizadores AGRIO reside en su control neumático y sus barras de pulverización con suspensión pendular. El control neumático responde rápidamente, su mantenimiento es muy sencillo e incluso con el uso intensivo de fertilizantes líquidos agresivos, su vida útil es ilimitada. Gracias a su excelente equilibrio y suspensión independiente, las barras cumplen con los más altos requisitos de pulverización incluso en terrenos irregulares.
La empresa presta gran atención al servicio posventa, esforzándose por garantizar el funcionamiento fiable de los pulverizadores no solo durante el período de garantía, sino también durante toda su vida útil. Las máquinas están diseñadas para soportar la carga máxima en condiciones de uso intensivo.
Filosofía AGRIO: nos esforzamos por que nuestros clientes saquen el máximo provecho de sus pulverizadores. Por ello, AGRIO fabrica cada máquina directamente para cada cliente, teniendo en cuenta sus condiciones y necesidades específicas, para que al operar el pulverizador, no falte ningún equipo necesario ni la máquina contenga equipos innecesarios.
Actualmente, AGRIO es el mayor fabricante de pulverizadores agrícolas de la República Checa, y sus productos se encuentran entre los mejores del mundo. Los pulverizadores 60% fabricados por esta empresa se comercializan en el mercado alemán, caracterizado por sus exigencias especiales, estrictos requisitos y una legislación rigurosa.
